A la mañana siguiente nos levantamos y Raquel vivió por primera vez la experiencia de viajar a dedo. Fuimos hasta la aduana y después de un rato nos subimos a un camión que nos dejó en un cruce, de allí un coche nos llevó hasta un peaje donde conseguimos un camión que nos llevó hasta Colonia del Sacramento.
Una vez allí visitamos la ciudad antigua, bastante mona la verdad y se ve rápido.

Nos acercamos al puerto de nuevo para volver a Buenos Aires en Buquebus, esta vez podíamos pagar con tarjeta sin problema.
Llegamos a Buenos Aires y directamente nos compramos un billete para esa misma noche nuestro próximo destino: CÓRDOBA